Bueno a la vista está solo una parte. El iceberg que tienes delante se llama SP500. El nombre se lo he puesto yo al guardar la imagen. Está en jpg por cierto, es como el NFT pero más barato.

Lo que ves son las FAANGs, porque del resto del S&P, muchas, están bajo el agua. Algunas bastante bajo el agua.

Esta es una imagen de Lance Roberts, su artículo “Wipe Out” Below The Calm Surface Of The Bull Market no tiene desperdicio.

En rojo el cambio de precio desde máximos, a finales de 2021.

Pues sí señor, esto también es el S&P, aunque esté casi en máximos. Como ves muchas llevan un buen roto.

En fin, pues así de desproporcionados entramos en 2022, para mí un año clave.

Y el caso es que llevamos mucho tiempo con el viento a favor en cuanto a políticas monetarias y fiscales, pero parece que eso llega a su fin.

Digo parece porque del dicho al trecho hay un hecho. Y es que ya en 2018 la FED intentó tensar la cuerda y al final terminó recogiendo cable y dando marcha atrás.

Para el que no vino ese día a clase, tuvimos subidas de tasas de interés cada trimestre y además reducción del balance. Eso acabó con un descalabro del 21% en tan solo dos meses y medio, y no fue a más porque la FED “pivotó” xD

Disculpad por subir tipos ahora mismo los bajo, y además ya no solamente no reduzco el balance sino que compro letras del tesoro.” -J.P. pivoting

Volviendo a 2022, creo que la combinación de retirada de estímulos y subida de tipos, junto con unas valoraciones históricamente altas y un comportamiento eufórico, son para estar al loro.

Lo que hemos visto en algunos mercados, en algunas criptos, en las meme stocks, en las SPACs, en las IPOs, y en como los particulares se han metido en bolsa, pasará a la historia.

Solo en 2021 entró más dinero en bolsa que en los últimos 19 años juntos en términos netos, se dice pronto.

Pero es que además se han metido en opciones, el apalancamiento es de locos y la inflación está en máximos de 30 años, vamos que (de producirse) el movimiento a la baja puede ser guapo.

Buenas noches.